viernes, 26 de junio de 2015

Wert ya está fuera, pero falta su ley de educación

Se ha ido cuando queda poco para que se acabe el partido. Es lo de menos si lo ha hecho forzado por quien le nombró. Tampoco importa ahora que incidamos en su marca negativa de impopularidad. El problema es que sigue en vigor su horrenda ley de educación, la LOMCE, su opción descarada por una universidad clasista, sus medidas en contra de la cultura o el aumento inusitado de los recortes presupuestarios. Urge que desde las comunidades autónomas que no están gobernadas por el PP se paralice la aplicación de la LOMCE. Se puede hacer con voluntad política y hasta haciendo uso de órganos institucionales, como la conferencia sectorial de educación. No podemos permitirnos que se inicie su aplicación, con todo lo que conlleva, para que luego, si hay un cambio de gobierno, empiecen a hacerse modificaciones. A no ser que en lo fundamental se pretenda mantenerla.